sábado, 8 de agosto de 2009
Pechugas a la vice
Si hay algo más asqueroso que ver por TV a la vicepresidenta De la Vega echar bilis por la boca contra el PP es, que te quede una pechuga de pollo semi-cruda.
Evidentemente es una comparación muy desagradable, que si la imaginas mientras haces la digestión, acabarás devolviendo, pero espero ya hayas comido.
En mi caso, ambas cosas no están dentro de mis preferencias.
Ni me gustan demasiado las pechugas, por ser demasiado secas, ni me gusta la vicepresidenta por encontrarla también demasiado seca, de ideas y de intenciones.
Pero como un amigo mío, que es médico, me ha dicho que el pollo es muy sano y la pechuga también, pues de vez en cuando, lo hago.
Hay gente, -no sé si la vice-, que a las pechugas les mete queso y jamón.
Yo no conjugo el cerdo con el pollo.
Me parece que no son compatibles.
Por lo tanto, le meto una loncha de queso de fundir y me hago lo que yo llamo un ali-oli rápido para darle un poco de "Alegría".
(Inciso): Para Guatemala: El pollo a la Alegría puede ser una opción. Un fuerte abrazo
Continúo:
El ali-oli, -también llamado ajo-aceite-, se hace a base de machacar ajo con sal en un mortero y echando muy poco a poco, aceite de oliva. Es un poco coñazo, pero queda muy rico.
Si no te apetece tirarte 20 minutos dale que te pego, te curras una mayonesa y cuando está hecha, le agregas un ajo pelado y lo bates con la minipimer.
Te quedará muy recurrente.
Hoy, en honor a mi amigo el médico he hecho unas pechugas rellenas con queso y las he acompañado con una mayonesa de ajo.
Así han quedado las pechugas
Como puedes ver, es interesante ver que no tiene nada que ver el color de la pechuga con la vicepresidenta y que el queso, está fundidito y listo para mojar en la mayonesa
Luego, le pones la mayonesa al lado y comienza lo interesante.
Cortas trozo de pechuga, mojas en la mayonesa de ajo. Cortas trozo de pechuga, mojas en la mayonesa de ajo. Cortas trozo de pechuga, mojas en la mayonesa de ajo.
Y así, hasta que se te acaben las pechugas o la mayonesa.
El día en que se nos acaben las y los vicepresidentas/es, todo será más apetitoso y digerible.
Pero mientras tanto, que aproveche.
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